¡Ohh, el invierno!, acá en Buenos Aires hacen sólo tres grados de temperatura, un café bien caliente me acompaña mientras escribo, sólo falta que vuelva a llover y ya no puedo pedir nada más. Me encanta esta época del año, es perfecto para dejar de comer ya que la ropa disimula el descenso de peso.. y cuando llega el verano no tengo tantas ganas de pegarme un tiro.
Aunque de nada me sirve ser disimulada, al menos no con mi padres, sé que leen mi blog. No saben borrar el historial, ¿Se piensan que no me iba a enterar? Mami.. papi, si están leyendo esto quiero que sepan que los odio con todo mi corazón. Estoy pensando en cambiar la dirección de mi blog, pero no quiero, de alguna forma el nombre que tiene ahora me genera cierto afecto. Siempre tuve esa costumbre, el generar afecto sobre cosas sin vida, o hacia palabras en este caso. Como cuando estuve con pepa (lsd) en un parque, y no quise dejar atrás a un par de piedritas, entonces me las llevé. En muchos casos, prefiero quedarme con algo sin vida, con un objeto.. que con una persona. Mi mente es un desorden, mi mente rechaza cualquier tipo de sentimiento humano, rechaza cualquier cosa que provenga de alguien. Lo rechaza a él, aunque por otro lado, él es lo único que quiere. Como sea, ni yo se que puede llegar a significar eso.
Volviendo al tema, esta semana planeo hacer una "dieta" de sopas light y café. Nunca logro hacer un ayuno completo, de alguna manera consumo alguna caloría, ya venga del café o del alcohol. Creo que soy alcohólica y eso me esta retrasando todo, no hay nada más calorico que un whisky, un licor de lo que sea o un vodka. Pero como sea, los vicios van a estar siempre conmigo. Y en verdad, creo que mis vicios y mis monstruos son lo único que siempre van a estar conmigo, por eso yo jamás los voy a dejar. Eh dicho.
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